La seguridad infantil en el transporte

La mayor parte del tiempo creemos que con solo dejar a los niños en el transporte ya están completamente seguros. De hecho, no solamente se trata de que puedan ocurrir robos o secuestros, sino que también pueden ocurrir accidentes.

Debemos tener en cuenta que no siempre existe seguridad infantil en el transporte. Por eso te diremos algunas pautas a tomar en cuenta cuando toque dejar a nuestros niños en el autobús.

Existen páginas y diversos folletos que discuten sobre transportes profesionales, como este artículo que habla de ISOFIX en los autocares.

Los autocares proveen un equipamiento dentro del vehículo que garantiza la seguridad total. De hecho, todo transporte está bajo un reglamento donde se presentan normas a seguir. En caso del incumplimiento de algunas de ellas, la sanción puede costar la supresión del vehículo o multas.

Para mayor seguridad, deben existir, además, unas rutas adecuadas para evitar accidentes. En estos casos, a cada madre y padre, se les ofrece un servicio de información acerca del transporte de los más pequeños. De esa manera la paranoia no se apoderará de sus cuerpos, haciendo que entren en pánico cuando toque la hora del bus escolar.

La importancia de la parada y del bus

Es recomendable que las paradas de recogida estén ubicadas en un lugar seguro. El punto de parada no debe ser obstaculizado por ningún objeto. El acceso de peatones debe ser directo para el tránsito correcto de los mismos. Por otra parte, la señalización se toma muy en cuenta porque ayuda a niños y también a conductores. Gracias a ella, los niños pueden esperar de manera tranquila la llegada del bus.

El bus, por su parte, debe poseer cinturones de seguridad y contar con un espacio agradable. También tener ventanillas de salida de emergencia y un extinguidor para casos extremos. Los pasillos deben estar libres de objetos que obstaculicen el paso.

¿Qué hacer en caso de emergencias?

Tanto el conductor como los niños, deben ser entrenados en simulacros en caso de que exista alguna emergencia. Los simulacros ayudan a la toma de decisiones en momentos difíciles y de alta tensión. El papel que ellos jueguen debe ser activo y definido en caso de evacuación.

Además, se hablará al conductor del uso correcto de extintores y a reconocer las ventanillas de emergencia. Todo saldrá tan bien como tratemos de evitarlo y prepararnos para aquellas situaciones. La seguridad infantil en el transporte es necesaria y de asunto reglamentario para todas las instituciones y centros educativos.