flor de salLa flor de sal es una variedad de sal que se obtiene en salinas naturales, mediante un proceso totalmente artesano y ecológico que da como resultado una sal de calidad gourmet.

En España tenemos algunas de las mejores salinas del mundo, no en vano la producción de flor de sal en España es una de las más destacadas del planeta, junto con las salinas francesas o mexicanas.

No es extraño que la flor de sal se produzca en enclaves de ensueño, muchos de ellos protegidos por las autoridades como Parques y Reservas Naturales. Este es el caso también del Parque Natural de la Bahía de Cádiz, uno de los principales centros de producción de sal de España.

El Parque Natural de la Bahía de Cádiz tiene una superficie que supera las 10.000 hectáreas y comprende hasta 5 municipios de la provincia de Cádiz (Cádiz, Puerto de Santa María, Chiclana, Puerto Real y San Fernando. Desde el año 1989 es considerado como espacio natural protegido.

Entre sus características destaca el enorme valor ecológico que supone, con fauna y flora muy variada y que comprende todo tipo de peces, aves, moluscos, pequeños mamíferos y plantas de secano y acuáticas de gran valor. Especialmente importantes para su ecosistema son las aves, que cuentan en la Bahía de Cádiz con la protección del ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves).

Entre las actividades que se realizan en el Parque Natural de la Bahía de Cádiz destacan, por un lado la pesca, y por el otro, la producción de sal. En su territorio se sigue produciendo sal de la misma manera que se hacía hace cientos de años, mediante un proceso totalmente tradicional y artesano.

La sal entra por unos canales por efecto de las mareas y llega a unas balsas donde, por efecto del sol, el agua se evapora cristalizando en una fina lámina de sal en la superficie. Precisamente a esa lámina de sal es a la que denominamos flor de sal, una de las variedades más preciadas por su sabor, textura, propiedades para los alimentos y efectos beneficiosos sobre la salud.

La Bahía de Cádiz es, junto con las salinas de Mallorca, las del Cabo de Gata o las de la Delta del Ebro, una de las más reconocidas a nivel europeo. Además, a lo largo de los años ha tenido que hacer frente y resistir a los continuos intentos de modificación por parte del hombre. Esperemos que lo siga consiguiendo.